El fracaso del Multiculturismo y del Presentismo

El móvil se ha convertido en el protagonista principal de esta sociedad en la que vivimos desde hace aproximadamente 23 años. Es una época en la que los jóvenes comienzan a tener problemas (que intentan remediar en la farmacia) mucho antes debido a la falta de actividad física al aire libre, al uso excesivo de las nuevas tecnologías y al estrés propio de estos tiempos.

Esto no es algo nuevo, sino que ha estado latente durante años, al igual que el excesivo presentismo, donde casi no se considera el futuro.

En mi artículo anterior, «¿Hacia dónde nos lleva el futuro?», advierto sobre la importancia de tener en cuenta el pasado y no olvidar lo sucedido en estos últimos años para no tropezar de nuevo en el futuro cercano.

¡Caer en el presentismo es un error!

Del mismo modo, creer en este modelo de multiculturalismo es otro error. Su fracaso acaba de verse y notarse en Francia a través de los recientes estallidos sociales, con 2.560 incendios, 1.350 vehículos quemados, 250 edificios y tiendas en llamas, y un número indeterminado de saqueos y atrocidades. La Francia multicultural ha sido un fracaso, a pesar del despliegue de 45.000 gendarmes (nunca antes visto), según los titulares de los periódicos, «porque la violencia se ha apoderado de Francia».

España no debe caer en el mismo error si deseamos tener paz. En mi opinión, el problema es un error de concepto, que llevo años escribiéndolo, ya que no existe una integración real.

Escuchar a Pedro Sánchez que «promete ayudar a Ucrania «el tiempo que haga falta» y «sin importar el precio»» (ABC, 1 de julio), sin proporcionar fechas ni cifras…

Lo mismo dijo en Murcia la última vez que estuvo allí antes de las pasadas elecciones, sobre el tema del agua. ¡No lo creáis! Sólo lo dice, para obtener beneficios electorales a través de la falsedad. Es un oportunista.

Es necesario que prevalezca el sentido común.

La familia farmacéutica debe ser «más participativa»; por eso, siempre he intentado introducir el voto electrónico en nuestros estatutos (Colegiales y de Hefame); y he puesto a disposición de todos aquellos que tengan algo que aportar, esta página de información. Los presidentes deberían delegar más responsabilidades y no quedarse sólo con los buenos resultados obtenidos (como han hecho y hacen algunos), vanagloriándose de los éxitos y ocultando los fracasos.

Mi libro «Huellas de Hefame» (que puedes comprar a través de esta web o llamando al 958-212550) contiene nuevas ideas, para enriquecer nuestra profesión, así como colaborar en la lucha contra el cambio climático, educando a la población sanitaria, y dando ejemplo. Toda obra basada en la verdad tiene futuro, aunque la corrupción y el abuso de poder intenten destruirla. Yo confío en que los que defendéis nuestra profesión, lo leáis.

P.D.: Próximamente os pondré en contacto con «Francesca Pasarisa Dobón», una catalana que lleva años manejando exitosamente el mercado laboral de la farmacia en toda España. Puede ser de gran ayuda, ya que cuenta con un estudio sobre los perfiles de los contratados.

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También os recomiendo leer mi última novela, «La Mujer de Nochevieja», que podéis adquirir a través de esta web. Es una divertida historia real de amor, que también aborda el tema del multiculturalismo en Francia (un fracaso con consecuencias) para satisfacer los egos de algunos presidentes como Zapatero y Sánchez. Es una manera de ver la realidad.