¿Qué dirá su Majestad, cuando unos golpistas elijan al Presidente de España?
España está al borde de perder el «Estado de Derecho», y con ello, entrar en lo que se podría llamar «Normas Líquidas», donde la verdad se convierte en medias verdades y ambigüedades, en otras palabras, en la mentira.
Es impresentable que en declaraciones de hoy (13/11/23 ABC) el Ministro Bolaños diga que la amnistía es «impecable» con La Constitución, cuando durante años la estuvo – él mismo – rechazando. Este Estado de Derecho, será una pérdida, que llevará muchos años y esfuerzos recuperarlo, si es que se logra.
Aún estamos a tiempo para cambiar esta realidad.
La Verdad en Tiempos Inciertos
¿Y qué es la realidad? La Ley de la Gravedad, el Polo Norte y el Polo Sur, las leyes de la Física y de la Química, y «el sentido común», La Verdad. Lo que no nos miente y es independiente de ideologías. Para un aficionado a la vela, como yo, el Norte Verdadero, es el rumbo verdadero, y los españoles hemos perdido ese rumbo, esa brújula, porque los rumbos a veces se desvían debido al magnetismo y otras causas. Y deben correjirse. En este caso, es la degradación democrática, y los intereses particulares de un Presidente (que como todos conocen) no quiere deshacerse del poder; tal vez El Rey lo corrija.
Hemos perdido nuestro Norte verdadero, debido a las mentiras.
Es hora de corregir nuestro rumbo y dejar de esquivar la realidad. Debemos dar un paso al frente, como lo hicieron más de dos millones de personas el pasado 12 de noviembre en una manifestación que, aunque llega algo tarde, es un paso en la dirección correcta, expresando su disconformidad con este Gobierno.
Sánchez y la Destrucción de España
Sánchez parece estar siguiendo una estrategia para convertir lo falso en verdadero, matando la verdad en el proceso. Pero aún tenemos la oportunidad de cambiar esta realidad. «El estado ha sido humillado», dicen los notarios, mientras Vox convoca una huelga general para el próximo 24 de noviembre. Esta es la mayor protesta de la democracia en España.
P.D. – El Peligro de la Pasividad
Lo que sabemos es que nuestra pasividad, que algunos justifican como paciencia, nos ha llevado a soportar esta inestabilidad que podría aún empeorar. La España que conocemos y amamos está descomponiéndose, pero confiemos todavía en su bravura y nobleza, esperando que <la fuerza de la Razón> se mueva y el espíritu patriótico (de los de derechas e izquierdas) la acompañe; y entre todos, frenemos este desatino, porque España es de todos.